Nuevos proyectos

Antes de ayer empecé dos proyectos nuevos. Fue inevitable, tantas imágenes bonitas que se ven todos los días, las preciosidades que hacen las compañeras, y la tentación de investigar en Ravelry dan demasiadas ideas. Además, las agujas Knit Pro pican desde que me las compré y me llaman para que las use una y otra vez, son fantásticas.

Dentro de poco iré a ver a mis sobrinos, hace muchísimo que no les veo, y ya que al niño le hice una manta cuando nació, me apetecía hacerle una manta a la pequeña. Esta vez he aprendido, y he elegido un diseño más rápido, agujas más grandes y menos puntos. Espero y confío en que de aquí a dos semanas, que es cuando me iré, me haya dado tiempo a terminarla. He montado 150 puntos en agujas del número 5, con dos hebras de hilo, una naranja y una rosa. Después de 10 vueltas de borde en punto arroz, voy a hacer un punto damero de 10x10 con 10 puntos de punto arroz a cada lado, haciendo de borde.

Al principio había pensado en la misma combinación, en otro tono más claro de rosa y color crema, pero me di cuenta de que era demasiado de bebé. Ya sé que mi sobrina es un bebé, que todavía no tiene un año, pero yo no voy a ser una tía cualquiera. Rosa y blanco son los colores más típicos de una niña, y yo no quiero ser tan predecible; es cierto que rosa y naranja también son muy de niña, pero la mezcla es muy llamativa sin llegar a ser cargante. Además, mi amiga, la mamá, tampoco es una chica corriente, así que estoy segura de que va a preferir esta manta en tonos llamativos que en los tonos pastel. Ahora ya está un poco más tejida, pero dejo una foto del comienzo.

El otro proyecto es el Greek Revival, aunque llevo muy poquitas vueltas. Este chal se teje desde el pico inferior, no como otros que empiezan en el cuello, y aunque prestándole atención es muy fácil de hacer, no sería yo la que se atreviera a traducir el patrón. Se van apreciando un poco los rombitos de la greca del borde, pero muy poco. En mi opinión, este es un patrón para dedicarle poco tiempo al día. Quizá las tejedoras más expertas lo vean mejor, pero yo, en menos de 20 vueltas ya no distinguía y sólo veía manojos de K, P, SL y K2TOG… como decimos en España, oía campanas y no sabía dónde.

Creo que me va a gustar la combinación entre la delicadeza del calado de este chal, con el puntito rockero de la lana matizada en blanco, rojo y grises. Un chal juvenil, pero bonito y muy trabajado.

Por otro lado estoy pendiente de empezar una serie de Cowls o cuellitos de diseño propio que me ha inspirado Ravelry. Vi hace poco unos cuellos largos, o bufandas redondas que se pueden usar de muchas maneras y me pareció muy original, así que para usar algunos ovillos de lana que se me acumulan pienso hacer uno para mis amigas, mi madre, mi tia y mi prima, si me da tiempo, y regalárselos para Navidad.

PD: Voy a tardar un poco más en hacer la continuación del post de las bufandas, porque estoy preparando un tutorial en fotos para enseñaros a hacer las bufandas mágicas. Puede que lo entendáis mejor si veis los pasos en foto, porque la última vez que lo expliqué, parece que no se entendió muy bien.