Esto es lo otro a lo que me dediqué el fin de semana, mi otra labor permitida.
Se hace mucho más rápido de lo que imaginaba, aunque a estas alturas, las vueltas empiezan a hacerse un poco largas, no quiero pensar en más adelante...
Estoy encantada con él, la verdad. Además, la lana está ayudando mucho, los puntos se quedan uniformes y preciosos como si estuvieran tejidos a maquina. Por si no os acordáis, estoy haciéndolo con Katia Austral.
Estoy utilizando uno de los trucos más recomendados y útiles, que es el de echar una hebra después del primer punto y soltarla en la siguiente vuelta, para que los bordes no queden tan tirantes. Este es el aspecto que tienen los bordes, en un solo color, y con el cambio de color, pero en el borde donde NO se hace el cambio.
Lo cierto es que utilizando este truco, el cambio de color se vuelve un poco peliagudo. Yo todavía estoy buscando la mejor forma de hacerlo, pero cuando la encuentre, os lo contaré.
Lo tengo aparcadillo por las donaciones, pero espero seguir adelante la semana que viene.
No sabía la técnica de echar la hebra. Queda mucho mejor.
ResponderEliminarBss.
A mi me gusta mucho la pinta que está tomando...
ResponderEliminarEsta quedando muy mono, y bueno a echarle ganas ehh?? esta preciosidad no se puede quedar aparcada...besos!
ResponderEliminarQue bonitos colores!!
ResponderEliminarbesitos